Forra con pequeños circulitos de papel de horno y mantequilla la base de 8 moldes para magdalenas o cupcakes de tamaño normal (unos 5-7cm de base). También puedes hacer el cheesecake en un molde de 18cm de diámetro, pero asegúrate de forrar la base igualmente.
Tritura la mitad de las avellanas y reserva la otra mitad para decorar.
Tritura también el chocolate y mezcla con las avellanas del paso anterior.
Bate la mantequilla con el azúcar hasta obtener un compuesto homogéneo. Asegúrate de que la mantequilla esté tierna antes de batir. Puedes ayudarte de un tenedor para ablandar la mantequilla antes si lo necesitas de montar.
Añade las yemas del huevo de una en una hasta incorporarlas bien.
Añade a la mantequilla batida la mezcla de avellanas y chocolate, la harina, la sal y la harina de almendra.
Monta las claras a parte e incorpora a la mezcla anterior en tres veces.
Vierte en los moldes ya forrados y hornea a 190ºC durante 20 minutos. Comprueba con un palillo que la masa esté cocinada antes de retirar del horno.
Preparación de la ganache
Calienta la nata hasta que esté a punto de hervir.
Vierte sobre el chocolate troceado y mezcla bien hasta obtener un ganache.
Decora tus cheesecakes de ricotta, avellanas y chocolate con ganache por encima y algunas avellanas enteras.
Notas
Tal y como te indico en la receta, puedes hacer estos cheesecakes individuales o en forma de tarta de unos 18cm de diámetro.
Puedes usar ricotta o requesón para esta receta, son básicamente lo mismo.
También puedes usar sólo harina de almendra o sólo harina de avellana. Si puedes elegir sólo una, el resultado es mucho más rico con la harina de avellana.
Puedes usar chocolate con leche o chocolate blanco si lo prefieres, pero la combinación no es tan buena. Piensa que la ricotta está hecha a base de leche y si usas chocolate con leche o chocolate blanco estarás diluyendo mucho el sabor.